El otoño es la mejor época para encender el horno, y yo os traigo la receta definitiva para hacer calabacines rellenos.
Yo uso los calabacines redondos porque son mas bonitos al horno y son mas sencillos de rellenar, pero se puede hacer con calabacines normales también. Solo hay que vaciarlos con cuidado de dejar un poco de fondo.
– Para esta receta necesitamos:
Calabacines redondos (uno por persona)
Huevos (uno por comensal)
4 champiñones o setas de temporada
bacon (con unas lonchas nos vale. Si quieres tu receta vegetariana pasa de este ingrediente 😉
aceite de oliva
sal
pimienta y hierbas aromáticas al gusto
queso rayado
Lo primero que vamos a hacer es limpiar bien los calabacines y secarlos. Si usáis calabacines normales (de los largados) cortadlos por la mitad y vaciadlos dejando un poco de fondo.
Para los calabacines redondos, cortamos la parte superior a podo de tapa y vaciamos con ayuda de una cucharita. Salamos un poco por dentro y los dejamos escurrir un poco mientras hacemos el relleno.
Limpiamos las setas y las troceamos pequeñas, salteamos un poco con aceite caliente sal y pimienta y parte del vaciado de los calabacines bien picado. Si vas a usar bacon, troceado finito y échalo al final del sofrito. Reservamos en un plato.
Encendemos el horno a 180º
A continuación rellenamos hasta la mitra los calabacines con las setas salteadas. Colocamos los calabacines en una bandeja honda de horno. Un truquino para que los calabacines redondos no bailen es cortarles un poco por abajo para que estén mas planos. Procuraremos no colocarlos muy juntos para que se cocinen bien por fuera ya que no los hemos pelado.
Cuando estén todos en su sitio, echaremos un huevo dentro de cada calabacín con cuidado de que no rebose (si son muy grandes podemos quitarle parte de la clara) y espolvoreamos el queso rayado, un poquito de sal y pimienta al gusto.
En otra bandeja plana de horno, colocamos las tapas de los calabacines redondos para que se cocinen a la vez y luego poder presentarlos con su sombrero. (Los calabacines alargados no llevan sombrero 😉
Metemos las bandejas en el horno durante 20-30 minutos con cuidado de que no se queme el queso.
Pasado ese tiempo, colocamos cada calabacín en un plato con su tapa por encima y servimos con el maldito natal que sueltan en la cocción los calabacines.
Y dos extras: Esta receta es perfecta como plato único, pero servido con un poco de arroz aromático tendríamos una comida completa. Y si te gustan las hierbas aromáticas, un poco de tomillo u orégano antes de meter los calabacines al horno le dan un toque muy campestre.
El secundo extra es si te gustan los huevos menos hechos. Mete los calabacines al horno 15 minutos sin el huevo y se lo añades (junto al queso) los últimos 10 minutos de horneado.
Espero que os guste esta receta con producto de temporada, bueno mas bien de entre dos temporadas, con calabacines de verano y setas de otoño. Y si te gustó estas recetas, te gustara esta de Tarta de zanahorias, espinacas y champiñones o la receta de Cuscús de verduras y menta
3 Comments
Esther
27 de septiembre de 2015 at 12:04 pmReceta facilita y vaya resultado, qué pinta. Ya estoy deseando hacerlo. Saludos.
Esther
30 de septiembre de 2015 at 9:50 amLos hice anoche para la cena, riquísimos.
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29 de julio de 2019 at 10:26 am