Aunque con un par de semanas de retraso, mi regalo de cumpleaños ha llegado en forma de flamante panificadora. Un aparato imponente y descomunal que cuece dentro de si el mas rico y pobre de los manjares, el pan. Creo que uno de los mayores placeres de la cocina es conseguir hornear una buena hogaza de pan, placer que es difícil de conseguir.Y con esta nueva amiga creo que vamos a comer calentito todos los días!
Pero se me planteaba un problema, y es que el pan sin aditivos ni conservantes dura menos, con lo que tuve que recurrir a la bolsa de pan de toda la vida. Tengo un par de ellas de mi abuela, pero son tan antiguas que me da pena usarlas y estropearlas. Así que se me ocurrió revisar el clásico y preparar mis propias bolsas para el pan.
Esta es mi bolsa para conservar pan, el pan en forma de hogaza o de molde, que las barras se me salen por arriba. Es una bolsa para guardarlo en un cajón, en la encimara o sobre la mesa, no para colgar.
Para hacer la bolsa he preparado un tutorial muy sencillo, así todos podemos disfrutar de pan tierno y un rato de costura fácil.
Para empezar, necesitamos, trapos de cocina limpios (no necesariamente nuevos, podemos aprovechar alguno que esté en buen estado), una cinta de algodón de unos 80 cm, tijeras, aguja, alfileres, hilo de coser y de bordar, bastidor para bordar, plancha y cinta métrica. Opcional es una hogaza de pan!
Una vez terminado, le damos a vuelta a la bolsa y ya está lista para usarse, yo además le bordé «su nombre» para que nadie en la cocina tuviera tentaciones de quitársela.
Para ponerle el nombre, usamos un lápiz para escribir muy suave en el borde de la bolsa. A continuación, con la ayuda de un bastidor de bordado tensamos la tela y empezamos a bordar.
Unas pocas puntadas de despunte para hacer las letras bastarán, en un color que contraste. Rematamos bien por el revés para que la corteza del pan no se enganche al sacarlo y listo!
Para que el pan se conserve bien y crujiente la mayor parte del tiempo posible, es importante guardarlo en un lugar fresco y seco, en una bolsa de algodón o de tela porosa para que no se queda blandito. Esta bolsa se cierra envolviendo el pan dentro de ella y dándole un par de vueltas a la cinta, rematando con una lazada.
Y a disfrutar de un pan tiernito y sabroso. 😀
6 Comments
Elara
4 de mayo de 2013 at 1:42 pmMe has hecho volver a recordar la bolsa del pan de casa de mi abuela! Te ha quedado genial tanto la bolsa como el pan. 🙂
Unknown
4 de mayo de 2013 at 8:38 pmGenial, genial, genial!! En casa también hacemos pan, a veces en la máquina y otras en el horno. Tengo a medias una bolsa pero no te imaginas cómo me estoy liando. Tu propuesta me parece fácil, sencilla… y preciosa!! Voy a intentar algo parecido. Gracias por compartir y un besote
maría
Unknown
4 de mayo de 2013 at 8:39 pmNo sé por qué sale desconocido. Soy maría (http://tokian-tokiko.com/)
md
5 de mayo de 2013 at 5:07 pmMe ha encantado el resultado y me gusta que el pan esté en su bolsa de tela.
Con los paños de cocina de Ikea se puede hacer mogollón de cosas.
Saludos y feliz domingo.
Esther
6 de mayo de 2013 at 9:19 amMe encanta!!!!! gracias por el tutorial, lo probaré! Un abrazo!
Marlaal
8 de mayo de 2013 at 6:56 pmHola! Te ha quedado muy chulo!
Me quedo por aki! 😉
Un saludo
http://marlaalita.blogspot.com.es/