Patatas que no son patatas

Hacía tiempo que no subía una receta al blog. Bueno, en realidad no es una receta, son tres minirecetas como alternativa a la clásica patata frita. Las estrellas de esta entrada son la yuca, el boniato y la batata.

La yuca es la raíz de la mandioca, un arbusto tropical. Su aspecto es leñoso por fuera y con una pulpa dura y muy blanca. Para cocinarla es casi necesario cocerla antes un poco, y luego ya se pueden freír y hornear. También hay que poner especial cuidado al pelarlas y cortarlas ya que la corteza es muy dura y además suelen venderse con una capa de cera para conservarlas mejor. Al tener la pulpa tan dura yo no recomiendo cortarla muy fina, mejor en dados y en tiras gruesas. Se cuecen con sal durante 5 minutos con agua que las cubra, se escurren bien y luego se fríen con aceite muy caliente.

Con las batatas y los boniatos es otro tema. Estos dos tubérculos son en realidad dos tipos de la misma especie. Los boniatos son de un color mas anaranjado por dentro, mientras que las batatas son mas blancas. En cualquier caso, su sabor es muy parecido, un tanto arenoso pero muy dulce. Recuerdo de niña comprar un boniato en la calle y compartirlo, ya que no me gustaban las castañas asadas y los hacían las castañeras en la Plaza Mayor. Para hacerlas no es necesario cocerla antes, incluso tampoco es necesario pelarlas si son nuevas y se lavan bien. Las cortamos muy finas con un buen cuchillo y las freímos con aceite muy caliente también.

Estas recetas también se pueden hacer en el horno para que sean mas sanas. Se calienta a 200º y se colocan los trocitos sobre la rejilla de la bandeja a media altura hasta que se doran. Se pueden hacer sobre la bandeja también pero coloca papel de horno debajo para que no se peguen.

Y a disfrutar de unas patatas fritas sin patata, con mas variedad de colores y sabores. Nosotras las hemos disfrutado con mojo rojo canario, pero se pueden acompañar con cualquier salsa y ser las mejores guarniciones. A cocinar!