El jueves es día de mercado, y hoy es jueves. Así que os traigo una receta sencilla y sana para hacer con verduras de temporada. Es apta para vegetarianos porque solo lleva vegetales, huevo, leche y queso.
Para hacerla vamos a necesitar:
un manojo de espinacas rojas (no confundir con el ruibarbo, que es muy complicado de encontrar en España. También se pueden usar las verdes si no encontráis las rojas),
2 zanahorias grandes,
4 champiñones,
tres huevos,
dos cucharadas de harina,
400 ml de leche,
una cucharada de aceite de oliva,
masa quebrada u hojaldre ya preparado,
sal y pimienta.
Preparamos una bandeja de barro con un poco de aceite para que no se peque la masa, la colocamos dentro y la pinchamos un poco para que no suba mucho. La doramos en el horno a 180º y la dejamos enfriar.
Mientras, lavamos y troceamos las verduras muy finas, con ayuda de un robot si querremos. Yo prefiero hacer los rozos mas grandes pero habiendo niños en casa es mas fácil tener éxito con ellos si no se encuentran trozos reconocibles de verdura.
En una cazuela a fuego lento, calentamos la leche y cuando esté a punto de hervir, bajamos el fuego y le añadimos la harina y el aceite, la pimienta y la sal, mezclados antes para evitar hacer grumos. Ya parado del fuego o con este muy bajo, la damos vueltas con unas barbillas hasta que espese un poco. Sacamos del fuego y añadimos las verduras cortadas y los huevos (no hace falta batirlos antes, se hace ahora con las verduras)
La mezcla se pone un poco oscura, no os preocupéis, es por los champiñones, que se oxidan rápido y se ponen marrones.
Vertemos la mezcla sobre la bandeja de la masa ya horneada y espolvoreamos queso rayado. Metemos en el horno a 180º unos 30 minutos, vigilando que no se queme. La superficie del pastel crece un poco, así que elige una bandeja que se alta, y evita que se queme ele queso colocándola en la mitad del horno.
Este pastel de espinacas puede acompañar a un plato de carne, de pescado o como plato principal acompañado de una ensalada y aperitivos. Lo puedes dejar hecho la noche anterior y servirlo tibio, con una salsa de tomate ligera o cortado en cuadradillos estando frío, como si fuera una tortilla.
Os aseguro que es muy jugoso y que a los niños les encanta.
!Buen provecho!
2 Comments
kareencountry
6 de marzo de 2015 at 2:07 amSe ve deliciosa!!!!! Hay que probarla a ver que tal.
Besitos
Armiarma Otroblogdecosturaypunto
9 de marzo de 2015 at 1:35 pmOhh, qué buena pinta. Me encantan las quiches. Me has tentado y voy a comprar la masa ahora mismo.