Empezamos mes nuevo, y lleno de flores además. Este es mi homenaje a las flores, con una manualidad para hacer un bouquet de dientes de león y las fichas para descargar de fruta, verdura, hierbas y flores de temporada.
Mayo es el mes florido en casi todas las culturas del hemisferio norte. Es el mes de María en la religión cristiana, el mes de Beltane en la cultura celta y el inicio de la estación cálida en muchas culturas nórdicas. Después de las lluvias y el aumento de las horas de sol prácticamente todas las plantas con flor se abren este mes. Desde los arboles frutales y las hortalizas hasta las silvestres.
Viviendo en una ciudad a veces es complicado conectar con la naturaleza. Es por que eso que quizá me gusten tanto las plantas y adore pasar tiempo en mi terraza. Yo me crié en un barrio lleno de parques y grande árboles y, desde que tengo uso de razón, he pasado los veranos en el pueblo de mi madre.
Pude ser esa la razón de mi pasión, o quizá es que en otra vida fui un gorrión o una abeja, no lo se. Pero creo que puedo pasar horas mirando como se mueven las hojas de un árbol o apreciar como se abre una flor a lo largo de los días y que eso me haga feliz.
Creo que esa capacidad me hace especialmente sensible a la naturaleza que me rodea. Como si me gritara suave desde los pequeños espacios verdes que habitan la ciudad para que sea consciente de ella.
La puedes ver en cada árbol solitario en su cuadradito de tierra rodeada de baldosas, pero tienes mirar un poco cerca o hacia arriba, donde sus ramas tocan el cielo.
Y también puedes verla en cada brizna de hierba que se cuela entre los adoquines, y de repente un día florece y se transforma en un reducto de margaritas, malvas o amapolas.
Amapolas que salpicaban los cuadros de Van Gogh y que si te acercas a mirarlas ves que están hechas como de papel de arroz arrugado. Y si tienes más de un rato para verlas puedes encontrar muy cerca algunos capullos antes de abrirse e imaginar que son como criaturas peludas de otro planeta a punto de abrir sus fauces.
Pero creo que con diferencia son los dientes de león mi flor de ciudad favorita. Puedes encontrarlas entre abril y junio en casi cualquier mota verde de la ciudad. Con sus flores en forma de botón amarillo llenas de pétalos finísimos, sus hojas afiladas y dentadas y con esa maravilla de la naturaleza que son los molinillos.
Las bolas esponjosas como de algodón no son más que las semillas o vilanos de la planta madura que están listas para viajar por el viento al siguiente destino.
¿Quién no ha soplado alguna vez un molinillo y ha pensado en un deseo? Hay muchas leyendas sobre esta flor, para muchos mágica y para otros medicinal. Sea como fuere, y seguramente por todo ese halo de cuento que tiene, son mis flores favoritas.
Por eso este mes te invito a mirar alrededor y descubrir que rastro ha dejado la naturaleza cerca de ti. Y si además tienes la suerte de encontrar un diente de león, no dejes de visitarlo hasta que se quede todo blanco y entonces soplar su molinillo y pedir un deseo… quien sabe si se cumplirá y la primavera que viene tengas muchos mas molinillos que soplar.
Ramito de dientes de león
Si no tienes tanta suerte y aún así te gustaría tener esas flores cerca, he preparado este paso a paso para hacer un pequeño ramo de dientes de león.
Para hacerlo vas a necesitar estos útiles:
- hilos de bordar (yo uso los de moulinè de DMC )
- blanco, verde y amarillo
- fieltro verde
- alambre de manualidades
- aguja de bordar (las de Pony son mis favoritas)
- tijeras
- pegamento textil
- tira de cartón
- cinta floral verde (opcional)
- imperdible de bisutería (opcional)
Para empezar vamos a hacer unas borlas enrollando los hilos de bordas en el cartón para hacer el molinillo daremos mas vueltas que con la flor. Y anudamos con la ayuda de la aguja de bordar, también de manera distinta si es para uno o para otro. La borla blanca del molinillo de anuda al centro, como para hacer un pompón, y la amarilla por abajo.
A continuación cortamos un trozo de alambre y lo pasamos por dentro de las borlas para crear el tallo. Ahora, con hilo verde fijamos bien las borlas creando el receptáculo de la flor y continuamos con el alambre para forrar el tallo.
Para hacer todo esto mas seguro yo suelo usar un poco de pegamento textil o de manualidades que es transparente y de secado no muy rápido para poder rectificar si me equivoco.
Cuando ya esta todo bien forrado podemos cortar las borlas y crear las flores y los molinillos. Las primeras se cortan de manera plana, y los molinillos redondos.
Cuando ya tienes varios puedes ir juntándolos para ver como dejas de largos los tallos e ir componiendo el ramito. En este punto puedes unirlos con cinta floral o con un poco de hilo y pegamento.
Para las hojas yo he elegido dos tonos de verde distintos. Recorta el fieltro con hojas dentadas y deja un poco de tallo para poder unirlos bien a las flores.
Recorte trozos de alambre y remata las puntas para poder coserlas mejor al fieltro. Puedes unir el alambre antes de coserlo con un poco de pegamento textil y así no se mueve mientras lo bordas.
Al final de la hoja haz un tallo rodeando todo con hilo como hiciste en las flores y prueba el tamaño que mas te guste.
Y ya tienes todas las partes para terminar tu ramito. Sólo tienes que unirlas con mas hilo y rematar con un poco de pegamento para que no se suelten. Y ya tienes tu bocadito de primavera perenne.
Yo he combinado los hilos de bordar brillantes y los mate para darle un toque más natural a las flores, pero tu puedes usar los que desees. Las cintas florales son unas tiras de papel encerado que se usan para hacer flores de papel y unen muy bien todos los tallos de las flores. Yo al final no los usé pero le dan un toque muy natural al ramito si los quieres usar. Y si quieres convertir tu bouquet en un broche, solo tienes que coserle un imperdible y lucirlo en la solapa.
Y si lo que te gustan son las amapolas, con hilos de bordar puedes hacerte unas tan bonitas como las que me bordé una vez en un vestido para una boda de verano.
Fichas de mayo
Y para terminar no quería dejar pasar esta bienvenida de mes sin dejaros las fichas descargables con las frutas y verduras de temporada. Pincha en este enlace para guardar la revista mayo de temporada.
En siguientes puede que haga alguna receta de temporada, pero si no podéis esperar os dejo mi receta gourmet de mermelada de mandarinas y jengibre, o la sencilla mermelada de ciruelas.
La primera es perfecta para esta época porque las mandarinas ya empiezan a escasear y hacerlas en conserva es una buena opción para seguir disfrutando de ellas.
Las conservas se suelen hacer cuando hay exceso de producto (si, yo también estoy pensando en la deliciosa mermelada de fresas que voy a hacer pronto) o cuando, como ahora, se acaba la temporada de un fruto y queremos seguir consumiéndolo un poco más.
Las ciruelas de mayo son aun un poco sosas, pero muy pronto tendremos las fruterías y los arboles llenos de ciruelas claudias que son mis favoritas y dan una mermelada dulce y con un aroma increíble.
Pero no solo de frutas se pueden hacer conservas. Se pueden hacer de verduras y hortalizas, y hasta de flores. Así que os dejo disfrutando de vuestro domingo de flores que yo voy a sacar todas mis recetas de conservas y voy a ponerme manos a la obra.
2 Comments
Lourdes
6 de mayo de 2019 at 7:17 amBon dia,
moltes gracies per aquests resums de flors, herbes, fruites i verdures, són una delícia!
paseandohilos
7 de mayo de 2019 at 9:05 pmEncantada!